lunes, noviembre 19, 2007

Reforma no Solidaria al Sistema de Pensiones


La reforma propuesta al Sistema de AFP crea un Sistema de Pensiones Solidarias que cubrirá a quienes no puedan financiar una pensión digna. La Pensión Básica Solidaria (PBS), a parir del primero de julio del 2009, alcanzará su valor máximo de 75 mil pesos. Por otra parte, se elimina el requisito de 240 meses de cotizaciones para acceder a la pensión mínima garantizada por el Estado. Esta pensión será reemplazada por la PBS que no exigirá dicho requisito. Para los que hayan logrado algún nivel de cotizaciones, existirá un Aporte Previsional Solidario que permitirá obtener una pensión de a lo menos 75 mil desde el 2009. Se pretende ir gradualmente alcanzando a las personas que integren un grupo familiar perteneciente al 60% más pobre de la población.

La reforma se hace cargo del hecho que más del 50% de los trabajadores chilenos no se encuentran cubiertos por el sistema de pensiones pues no alcanzarán a cubrir el mínimo necesario de fondos y de cotizaciones para obtener una pensión mínima garantizada por el Estado. Esta reforma es, en cierta manera, un reconocimiento explícito del fracaso experimentado por el sistema privado como mecanismo para resolver el problema de la seguridad social y particularmente de las pensiones de vejez. Sin embargo, no deja de sorprender el hecho de que siendo Chile un país exageradamente pulcro en materia de ordenamiento de los gastos públicos, se tolere un sistema privado de pensiones que, no habiendo resuelto el problema de las pensiones de seguridad social y habiendo ya provocado un enorme requerimiento por parte del Estado (6% del Producto Interno Bruto anual) para cubrir el déficit previsional que se ha producido en los últimos 25 años, continúe obligando al Estado a asumir mayores gastos por concepto de pensiones, haciéndose cargo –a partir de la presente reforma- de más del tres millones y medio de trabajadores que actualmente no está cubierto por el sistema.

Finalmente, la Pensión Básica Solidaria de 75 mil pesos, es por decir lo menos, muy poco solidaria. Hoy esa cifra es absolutamente insuficiente para resolver las necesidades de un adulto mayor y resulta irritante y grosero que, al mismo tiempo que ofrece pensiones absurdamente bajas y financiadas con los impuestos de todos los chilenos, la presente reforma permita a las AFPs y aseguradoras seguir obteniendo utilidades por sobre el 30% de los fondos depositados por los trabajadores.

Marcel Claude, Economista.

1 Comment:

SHL said...

Hola Marcel:

Solo una pregunta, que por el afán de imaginar me viene a la cabeza.
La hipótesis que esta detrás de mi pregunta es que los gobiernos, al menos en Chile, se mueren de miedo ante el gran capital, de hecho, parecen estos administradores de pueblo que quieren parecer eficientes cuando viene el patrón desde la metrópoli. En fin, siempre han tenido, tanto en dictadura como en la pseudodemocracia, una actitud de sometimiento y temor ante la riqueza en Chile.
Como soy psicólogo, me lo explico aveces de manera simplista, a través del trauma que les causo haber experimentado una lucha democrática socialista en el 70,en contraste con la suavidad del poder bien remunerado actual. Algo así debe transformar tu mentalidad quieraslo o no.
En fin, mi pregunta es, ¿Cual es la complejidad, tanto a nivel técnico como a nivel social de embargar el capital a las AFPs y volver a crear un fondo solidario?
Es una pregunta simple, intento nunca perder el sentido común, que creo el gran capital siempre pretende con su discurso mareador y ridículo intenta hacer. Como si nos fueran a asustar al escucharlos hablar.

Bueno, saludos Marcel, es un gusto volver a leer tu blog, es un alivio leer a personas conscientes y preparadas.

Desde Zaragoza, España.

Victor